El barrio de pescadores del Puerto de Sóller: Santa Catalina.

Decidir pasar sus vacaciones en el Puerto de Sóller es contar con la posibilidad de disfrutar del mar mediterráneo, de la Sierra de Tramuntana y de todos los rincones, lugares, historias y actividades que estos dos lugares característicos del mediterráneo ofrecen. Así que hoy les invitamos a explorar uno de esos lugares mágicos, llenos de tradición pesquera e historia. Un lugar que, sin duda, deben visitar durante su estancia en el Puerto de Sóller: el barrio de pescadores de Santa Catalina. 

El Puerto de Sóller, situado a pocos kilómetros del centro del Valle de Sóller, es el puerto natural más grande de toda la costa norte de Mallorca, un puerto único y especial por su característica geográfica que a lo largo de la historia ha refugiado a todo tipo de comerciantes, navegantes y pescadores. Un puerto que durante el siglo XVIII logró su máximo esplendor económico y comercial gracias a la exportación de productos locales como los cítricos del Valle de Sóller. Y fue justo en ese momento cuando los pescadores y comerciantes marítimos locales empezaron a construir el barrio de pescadores de Santa Catalina tal y como lo conocemos hoy en día. Un pintoresco barrio marinero, con pequeñas casas y calles de piedra con nombres de vientos. Lugares en los que los pescadores locales guardaban sus embarcaciones. Un lugar mágico y lleno de historia que le invitamos a descubrir durante su estancia en el Puerto de Sóller. 

Así que tras desayunar en el Aimia Hotel, partiremos andando en dirección al muelle del Puerto de Sóller para iniciar nuestra visita al barrio de Santa Catalina. Para ello, nos dirigiremos en dirección al Estanco del Puerto, punto en el que empieza el Barrio de pescadores. Una vez lle-guemos aquí, iremos subiendo la cuesta principal que conduce a la colina del Puerto. En este punto os aconsejamos ir subiendo por esta calle “principal” del barrio de pescadores y una vez recorridos unos 30 metros, dejaros perder por sus callejuelas estrechas y con escalones. Unas calles perfectas para caminar y disfrutar del ambiente tranquilo del barrio marinero. Un lugar en el que contemplar la esencia del mediterráneo y descubrir la tradición y arquitectura del lugar. 

Nosotros iremos subiendo siempre en sentido ascendiente por las empinadas calles del barrio hasta llegar arriba de la colina del Puerto de Sóller. Lugar en el que se encuentra el Oratorio de Santa Catalina, datado del siglo XIII y reconstruido en 1550, y el mirador de Santa Catalina, un lugar fantástico y espectacular para disfrutar de las maravillosas vistas al Mar Mediterráneo y a la Sierra de Tramuntana mientras disfrutamos de la brisa marina. Asimismo, también podremos ver y tomar alguna fotografía del Faro de Sa Creu, construido en 1864. 
Además, tendremos la posibilidad de entrar en el Museu de la Mar del Puerto de Sóller, ubicado en el antiguo Oratorio. Un museo marinero que recoge distintas exposiciones, historias, utensilios, materiales y herramientas para la construcción de barcos tradicionales, elementos de pesca y maquetas que reflejan la vinculación histórica que ha tenido el Puerto de Sóller con el comercio marítimo y la actividad pesquera. Un lugar lleno de historia en el que podremos conocer elementos tradicionales e históricos como las anclas, faluchos o cañones originales. Y todo completamente gratuito! 

Tras visitar el Museu de la Mar, continuaremos nuestra visita descendiendo de la colina del barrio de Santa Catalina en dirección al Puerto por la calle asfaltada hasta encontrar un pequeño desvío a la derecha. Desvío que tomaremos para ir descendiendo hasta nuestra siguiente parada en la que visita- remos nuestro siguiente punto de interés: 

El Oratorio de Sant Ramón de Penyafort, construido en el siglo XIII. Un oratorio actualmente restaurado y utilizado como sede de la Gent Gran del Port de Sóller, un lugar hoy en día cultural en el que la gente mayor del puerto realiza distintas actividades de ocio y culturales. Tras descubrir y sentir la magia de este histórico y pintoresco lugar, os recomendamos tomar alguna copa en alguno de los tradicionales bares de la zona del barrio antes de ir a comer. Nosotros les recomendamos visitar uno que se llama Bar la Payesa, uno de los bares más antiguos y pintorescos de la zona, un lugar en el que a día de hoy siguen yendo los pescadores locales. Tras esta pausa, les recomendamos disfrutar de la gastronomía local con una comida mediterránea elaborada con productos frescos y de temporada en el Airecel Restaurant, ubicado en el Aimia Hotel. 

Tras la pausa para la comida, nos dirigiremos de nuevo hacia el barrio de pescadores de Santa Catalina, pero esta vez dando un paseo al lado de los amarres. Un paseo muy agradable que nos permitirá observar distintos tipos de embarcaciones como veleros, yates o llaüts menorqui-nes hasta embarcaciones tradicionales de pesca. Así que iremos paseando por el muelle hasta llegar al final de Puerto, lugar en el que encontraremos los amarres de las barcas de pesca más grandes del lugar: los barcos de arrastre del Puerto de Sóller, conocidas como “ses barques de bou”. En la actualidad hay dos en funcionamiento, y las podremos ver llegar al puerto y descargar el pescado y marisco fresco capturado cada día a las 17h de la tarde a excepción de los domingos y el lunes. 

Finalmente, tras haber visto la llegada de “ses barques de bou” y haber conocido la tradición y cultura pesquera del Puerto de Sóller y de su barrio marinero de Santa Catalina, regresaremos de nuevo en dirección al centro del Puerto de Sóller para disfrutar de un agradable paseo por la primera línea de la bahía y contemplar la fantástica puesta de sol. Un paseo que les permitirá disfrutar del Mediterráneo y de la bahía del Puerto de Sóller así como sacar fotografías pa-norámicas desde distintos puntos tanto del Puerto como del barrio de pescadores de Santa Catalina y sus pintorescas casas antes de regresar de nuevo al Aimia Hotel. 

Uno de los mayores lujos de viajar es poder conocer lugares mágicos y tradicionales, llenos de historia, tradición y gastronomía. Descubrir la gente del lugar, su forma de vida, sus costumbres, su gastronomía. Descubrir lugares pintorescos y especiales como el barrio de Santa Catalina del Puerto de Sóller. Lugares mágicos como este que, sin duda, terminan formando parte de nuestro álbum de recuerdos. Si usted se aloja en el Aimia Hotel y tiene alguna duda o quiere obtener más información sobre este fantástico lugar del Puerto de Sóller, ¡no dude en preguntar a nuestro equipo de recepción! 

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